Compañías globales combaten la contaminación con reciclaje. Cada año se tiran 2 mil 120 millones de toneladas de basura en todo el planeta, de acuerdo con el sitio
The World Counts. La contaminación como problema en aumento, ha movilizado a compañías para desarrollar técnicas de reciclaje económicamente productivas.
Miniwiz, compañía taiwanesa fundada en 2005 especializada en el llamado
upcycling: reutilización creativa de la basura. En 2007 presentó su primer solución, un generador de energía portátil (capaz de transformar la energía del sol, el viento y la fuerza manual en electricidad) de plástico reciclado. Ha diseñado productos y construcciones en formato de sistema modular.
El EcoARK es el pabellón principal de la Exposición Internacional de Flora de Taipei y está hecho de un millón y medio de Polli-Bricks, botellas de plástico reutilizado fabricado por la
compañía como un material de construcción modular. En la iniciativa EcoFighter, rediseñaron un avión experimental de análisis aéreo con el fin de reemplazar sus partes originales con materiales reutilizados.
Ambas compañías han conseguido reciclar materiales como: compuestos orgánicos, colillas de cigarro, plásticos y hasta electrónicos viejos
TerraCycle, empresa estadounidense que desde 2002 (cuando desarrolló un sistema con el fin de transformar residuos orgánicos en fertilizante un año después de su fundación) ha creado más de 200 soluciones y productos procesados mediante
upcycling, como fundas para tabletas, mochilas, botes de basura entre otros.
Los materiales reciclados por TerraCycle son recolectados por un cuerpo de voluntarios. Esta compañía también ha tenido iniciativas de gran magnitud en el combate a la contaminación: en 2012 construyó un gimnasio al aire libre en Londres, mientras en 2017 se alió con el negocio químico Henkel con el objetivo de construir un parque de juegos para niños en Austria.
Pese al impacto positivo creado por las compañías combaten la contaminación con reciclaje, existen activistas en desacuerdo con el uso de empaques reciclados originalme
nte utilizados por marcas, pues los productos nuevos pueden convertirse en un modelo publicitario donde la ciudadanía crea a la empresa original con iniciativas verdes.