TERRACYCLE NEWS

ELIMINATING THE IDEA OF WASTE®

Ante los 'océanos de plástico', P&G utilizará material reciclable para sus envases de champú

Ante el drama del plástico en los océanos, la multinacional P&G anunció que para el 2018 más de 500 millones de envases estarán hechos en un 25% de plástico reciclado posconsumo, lo que representa el 90% de sus botellas utilizadas para el cuidado del cabello.

Según la Fundación Ellen MacArthur, el 95% del valor del material de envases plásticos, que oscila entre 80.000 y 120.000 millones de dólares anuales, se pierde como residuo, y al ritmo actual, en 2050 podría haber más plástico que peces en el océano. Cada kilómetro cuadrado de océano tiene aproximadamente 18,000 pedazos plásticos, más de un millón de aves y mamíferos marinos mueren anualmente al ingerir el plástico que arrojamos en los océanos.

El proyecto de Procter & Gamble - P&G requerirá un suministro de 2.600 toneladas anuales de plástico reciclado.  La empresa ha utilizado el plástico reciclado en envases desde hace más de 25 años, y el anuncio es un paso importante de la compañía para cumplir su objetivo para 2020 de duplicar el tonelaje de plástico posconsumo reciclado utilizado en los envases.

Esta labor la realizará en colaboración con las empresas TerraCycle y SUEZ, y representará la producción más grande de botellas reciclables hechas con plástico posconsumo a nivel mundial, el material reciclado será generado por miles de voluntarios y cientos de ONG que se encargan de limpiar las playas.

[caption id="" align="alignleft" width="600"]PG Foto: Crédito www.inforegion.pe[/caption]

“La botella de champú reciclable Head & Shoulders fabricada con plástico de playa es la primera del mundo en la categoría de cuidado del cabello. Aumentar el uso de plástico reciclado en los envases de nuestras marcas insignia, como Pantene y Head & Shoulders, facilita a los consumidores poder elegir productos más sostenibles, sin concesiones”, dijo Virginie Helias, vicepresidenta de Sostenibilidad Global de P&G.

ECOLOGÍA EN TUS MANOS: No podemos ni debemos tirar la toalla

Después de dos semanas de sólo malas noticias provenientes del país vecino Estados Unidos, me di a la tarea de encontrar algo positivo para compartir hoy con ustedes. La verdad me cuesta mucho trabajo, ya que todo lo que está haciendo ese nuevo presidente está en contra de lo que me motiva a escribir esta columna. Las decisiones que toma no consideran el impacto al medio ambiente, ni el efecto negativo en las vidas no sólo de los ciudadanos estadounidenses sino de los mexicanos, los canadienses y el resto de los habitantes del planeta.

Los próximos cuatro años se ven muy, pero muy retadores y depende de nosotros el reconocer, aplaudir y apoyar los esfuerzos de las empresas e individuos que siguen trabajando para lograr un futuro digno. Esfuerzos como el de una importante empresa estadounidense que está organizando la colecta de residuos de plástico de las playas para reciclarlos y convertirlos en frascos para shampoo: la marca Head & Shoulders, fabricada por Procter & Gamble, anunció la semana pasada que lanzará en Francia un nuevo empaque sustentable este año. Gracias al apoyo de miles de voluntarios, suficiente plástico ha sido entregado para la producción de este frasco innovador, creado en colaboración con TerraCycle (www.terracycle.com) y Suez (www.suez-environnement. com). Ejemplos como éste son, sin duda, precisamente los que queremos escuchar, los que debemos agradecer, los que tenemos que apoyar.

Hay que reconocer que somos muchos los que estamos preocupados, aún más preocupados ahora con la llegada de este hombre a la Casa Blanca. Es una persona tan egocéntrica, con tan poca visión de futuro, tan ignorante diría yo, que esperamos con temor el impacto negativo de sus políticas mal pensadas en torno al medio ambiente. El miedo es tanto, y compartido por muchísimas personas no sólo en Estados Unidos sino en cada país del planeta, que los científicos que controlan el Reloj del Apocalipsis (también llamado “del Juicio Final”) lo han avanzado 30 segundos. El reloj ahora indica que faltan 2 minutos y 30 segundos para la medianoche. Según Wikipedia, se trata de un reloj simbólico, mantenido desde 1947 por la junta directiva del Bulletin of the Atomic Scientists (Boletín de Científicos Atómicos) de la Universidad de Chicago. Utiliza la analogía de la especie humana estando siempre a minutos de la medianoche, donde la medianoche representa la destrucción total y catastrófica de la humanidad. Originalmente se tomaba en cuenta la amenaza de una guerra nuclear global, pero desde hace tiempo incluye también el cambio climático, además de cualquier otra cosa que pudiera infligir algún daño irreparable a nuestro planeta. ¿A qué se refiere con “otra cosa”? Es, precisamente, este nuevo gobierno de los Estados Unidos.

La nueva hora adelantada del reloj apocalíptico refleja qué tan seria es ahora la situación. Ha dicho no sólo ese presidente sino casi todo su equipo que no creen en el cambio climático, que cualquier acontecimiento climático inesperado que ocurre no es causado por nosotros y nuestras acciones. Ésa es una clara indicación de una visión corta, de una ignorancia total, de un egoísmo nunca antes visto ni tolerado en el país vecino.

Con más razón tenemos entonces que seguir. No podemos ni debemos perder la esperanza. Sigamos apoyando a las empresas que invierten en reciclaje y en la creación de nuevos empaques sustentables. Nos toca actuar con aún mayor convicción y continuar nuestros esfuerzos por lograr un mundo sustentable, invertir en energías renovables y limpias, y luchar fuertemente por un futuro digno para nuestros hijos y nuestro planeta. Es la única manera…

No podemos ni debemos tirar la toalla

Después de dos semanas de sólo malas noticias provenientes del país vecino Estados Unidos, me di a la tarea de encontrar algo positivo para compartir hoy con ustedes.

La verdad me cuesta mucho trabajo, ya que todo lo que está haciendo ese nuevo presidente está en contra de lo que me motiva a escribir esta columna. Las decisiones que toma no consideran el impacto al medio ambiente, ni el efecto negativo en las vidas no sólo de los ciudadanos estadounidenses sino de los mexicanos, los canadienses y el resto de los habitantes del planeta.

Los próximos cuatro años se ven muy, pero muy retadores y depende de nosotros el reconocer, aplaudir y apoyar los esfuerzos de las empresas e individuos que siguen trabajando para lograr un futuro digno. Esfuerzos como el de una importante empresa estadounidense que está organizando la colecta de residuos de plástico de las playas para reciclarlos y convertirlos en frascos para shampoo: la marca Head & Shoulders, fabricada por Procter & Gamble, anunció la semana pasada que lanzará en Francia un nuevo empaque sustentable este año. Gracias al apoyo de miles de voluntarios, suficiente plástico ha sido entregado para la producción de este frasco innovador, creado en colaboración con TerraCycle (www.terracycle.com) y Suez (www.suez-environnement.com).  Ejemplos como éste son, sin duda, precisamente los que queremos escuchar, los que debemos agradecer, los que tenemos que apoyar.

Hay que reconocer que somos muchos los que estamos preocupados, aún más preocupados ahora con la llegada de este hombre a la Casa Blanca. Es una persona tan egocéntrica, con tan poca visión de futuro, tan ignorante diría yo, que esperamos con temor el impacto negativo de sus políticas mal pensadas en torno al medio ambiente. El miedo es tanto, y compartido por muchísimas personas no sólo en Estados Unidos sino en cada país del planeta, que los científicos que controlan el Reloj del Apocalipsis (también llamado “del Juicio Final”) lo han avanzado 30 segundos. El reloj ahora indica que faltan 2 minutos y 30 segundos para la medianoche. Según Wikipedia, se trata de un reloj simbólico, mantenido desde 1947 por la junta directiva del Bulletin of the Atomic Scientists (Boletín de Científicos Atómicos) de la Universidad de Chicago. Utiliza la analogía de la especie humana estando siempre a minutos de la medianoche, donde la medianoche representa la destrucción total y catastrófica de la humanidad. Originalmente se tomaba en cuenta la amenaza de una guerra nuclear global, pero desde hace tiempo incluye también el cambio climático, además de cualquier otra cosa que pudiera infligir algún daño irreparable a nuestro planeta. ¿A qué se refiere con “otra cosa”? Es, precisamente, este nuevo gobierno de los Estados Unidos.

La nueva hora adelantada del reloj apocalíptico refleja qué tan seria es ahora la situación. Ha dicho no sólo ese presidente sino casi todo su equipo que no creen en el cambio climático, que cualquier acontecimiento climático inesperado que ocurre no es causado por nosotros y nuestras acciones. Ésa es una clara indicación de una visión corta, de una ignorancia total, de un egoísmo nunca antes visto ni tolerado en el país vecino.

Con más razón tenemos entonces que seguir. No podemos ni debemos perder la esperanza. Sigamos apoyando a las empresas que invierten en reciclaje y en la creación de nuevos empaques sustentables. Nos toca actuar con aún mayor convicción y continuar nuestros esfuerzos por lograr un mundo sustentable, invertir en energías renovables y limpias, y luchar fuertemente por un futuro digno para nuestros hijos y nuestro planeta. Es la única manera…

TerraCycle is Transforming Ocean Waste into Recyclable Shampoo Bottles

TerraCycle is turning plastic waste found on Europe beaches into new recyclable shampoo bottles for Head & Shoulders, which will be sold in France. To date, TerraCycle has collected more than 25,000 pounds of waste from Europe beaches to be used for product creation. TerraCycle plans on expanding the program to the U.S., specifically New Jersey, in the near future.   New Jersey 101.5 has more: Plastic waste that washed ashore or was left on the sand by beachgoers will make up to 25 percent of a first-of-its-kind product hitting shelves this summer in France. And it wouldn’t be possible without the help of a company in New Jersey. The Head & Shoulders product, according to Procter & Gamble, will be the first recyclable shampoo bottle comprised specifically of recycled beach plastic. But in order for P&G to get their hands on this plastic, they need assistance from Trenton-based TerraCycle, which prides itself on making the most out of hard-to-recycle materials.