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ESTOS EMPRENDEDORES COMBATEN LA GENERACIÓN DE BASURA EN MÉXICO

  • Dulce Álvarez de Granutec, Andrea García de PROtash y Michael Wass de TerraCycle participarán en INCmty 2018.
ESTOS EMPRENDEDORES COMBATEN LA GENERACIÓN DE BASURA EN MÉXICO
La CDMX produce alrededor de 12,500 toneladas de basura al día. Foto: Pixabay
La Ciudad de México es considerada actualmente la quinta megaurbe en el mundo con una población total estimada de 21 millones 581,000 habitantes, apenas por debajo de la metrópolis brasileña de Sao Paulo, de acuerdo con un informe  de laONU. Como toda megaurbe, la CDMX tiene múltiples problemáticas, entre las cuales una de las más complejas y que causarán mayor desvelo a los próximos alcaldes y alcaldesas de la Ciudad de México es la excesiva generación de basura, considerando que los capitalinos producen cada año 4 millones 562 mil 500 toneladas de basura, lo que representa 12,500 toneladas de basura al día en la Ciudad de México, un volumen de desechos sólidos preocupante a nivel global considerando que la taza de reciclaje en el país es sólo del 3.3% de acuerdo a cifras delWaste Atlas. Foto: Pixabay Destacados conferencistas y emprendedores que inspiran como Michael Wass de TerraCycle, Dulce Álvarez de Granutec y Andrea García de PROtrash, participarán en el Energy Summit que se llevará a cabo en el festival INCmty 2018 del 8 al 10 de noviembre en Monterrey, compartiendo conocimientos, experiencias e ideas para enfrentar los desafiantes cambios a los que debemos adaptarnos como lo es el reciclaje. En esta cumbre se hablará de las oportunidades y nuevos accesos a soluciones operativas y tecnológicas para las mejores startups, proveedores e inversionistas en los campos de sostenibilidad, energías renovables, eficiencia energética y tecnología limpia.
Michael Wass, Vicepresidente Global de Desarrollo de Negocios y Servicio al Cliente de TerraCycle, participará en INCmty con la conferencia “El gran valor de tu basura”. TerraCycle es una innovadora empresa que se ha convertido en un líder mundial por reciclar lo que normalmente se considera “no reciclable”. Ahí, Michael es responsable de la administración y expansión de más de 100 programas de reciclaje que se llevan a cabo en conjunto con socios como L’Oreal, Bimbo, KraftFoods, PepsiCo, Mondelez y P&G. Además, es también el creador de un programa que ofrece donaciones a organizaciones sin fines de lucro a cambio de residuos para reciclar.
En la CDMX TerraCycle está implementando un programa urbano llamado#TiraElChicleAlBote, una iniciativa que muestra que el reciclaje significa una segunda vida para el chicle, ya que, al ser mezclado este polímero con otros residuos, este puede convertirse en artículos de utilidad como: mochilas, lapiceras, botes de basura, jardineras, juegos infantiles para parques y en este caso el programa decidió enfocarse en botes de basura. El proyecto es de gran relevancia, pues será el primer programa de reciclaje de chicles en México; es un gran reto considerando que tan sólo en la calle de Madero, en el Centro Histórico de la CDMX, hay más de 200 mil gomas de mascar pegadas al suelo, según estimaciones de las autoridades capitalinas.
Emprendedores, Basura, Combaten, Contaminación, México, CDMX, Inc 2018, Inc mty 2018, PROtash, TerraCycle, Granutec, ONU, Monterrey, Medio Ambiente, Reciclaje, Wild Entrepreneur, Foto: Cortesía Dulce Álvarez, directora de Granutec, participará con la conferencia“Emprendimiento Verde”. Granutec es una empresa familiar que se dedica al reciclaje de hule y de llantas. En México se desechan 40 millones de llantas al año, de las cuales sólo se recicla el 9%.Granutec crea nuevos productos como impermeabilizantes para los techos de las casas, pinturas ahuladas, pisos para canchas de tenis, canchas de futbol, hasta la masterización del hule para la industria automotriz y del calzado logrando haber reciclado a la fecha 1,400 toneladas de llantas.

Tu cocina de basura cero

Más de un tercio de los alimentos producidos y distribuidos en Canadá se desperdician. Junto con los residuos no comestibles, como el envasado de alimentos, es un problema monumental. Aquí le mostramos cómo cambiar las cosas para mejor, comenzando en su propia cocina. Según un informe publicado por el National Zero Waste Council, "más de un tercio de los alimentos producidos y distribuidos en Canadá nunca se consumen". ¡Eso equivale a aproximadamente $ 31 mil millones de alimentos por año! La eliminación de desechos cuesta aproximadamente $ 100 mil millones anuales, y las consecuencias ambientales y sociales, como el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero y el hambre entre los menos afortunados, son palpables. Además, los residuos no comestibles, como los envases y productos de plástico, complican aún más el problema. De ahí la necesidad de darle una nueva mirada al concepto de desperdicio cero. Su auditoría de residuos de cocina. Una forma sencilla de reducir la producción de desechos es vigilar cómo se compran y almacenan los alimentos. Elija bolsas y contenedores reutilizables. Comprométete con bolsas de algodón o yute reutilizables, bolsas de malla para productos agrícolas, bolsas con cordón de algodón y recipientes de vidrio para artículos como pasta, harina, legumbres, frutos secos, granos, nueces y semillas. Evitar los alimentos procesados. Evítalos y también evitarás sus residuos de embalaje. Haga sus propias barras energéticas y envuélvalas en papel reutilizable de cera de abeja. Lo mismo ocurre con la mezcla de senderos que coloca en recipientes reutilizables, o con frutas secas y chips de verduras (un deshidratador de alimentos es una buena inversión). Escanear en busca de deterioro En su refrigerador, escanee regularmente en busca de alimentos en mal estado y deséchelos, menos los contenedores reciclables. "Cansado" pero aún así los buenos comestibles pueden convertirse en sopa o estofado. La fruta puede volverse crujiente o congelarse para batidos. Mira al futuro A continuación, evita el desperdicio futuro cambiando tu forma de pensar. La palabra mágica es "consecuencias". ¿Dónde terminará todo una vez que se haya pelado, cocinado, vaciado y comprado? Para comenzar, comprometerse con una mentalidad de cero desperdicios requiere un poco de disciplina, pero la buena noticia es que una vez que se familiarice con ella, la encontrará bastante adictiva, dice Daniel Papania, copropietario de Café Lupii Café de basura cero en Vancouver. "Empieza poco al principio, pero a medida que pasa el tiempo, se da cuenta de los beneficios, no solo en términos de dinero ahorrado, sino también en la salud y una actitud más feliz en general", explica. "Nunca retrocederás, incluso cuando las cosas se vuelvan más complicadas, porque hacer elecciones saludables un hábito se convierte en un sentimiento de empoderamiento". No más desperdicio de comida. La mayoría de la gente supondría que la mayor parte de los residuos en nuestras cocinas provienen del empaque. No tan. "El desperdicio de alimentos es el mayor culpable", dice Marcia Dick, analista de servicios de desechos sólidos de la Ciudad de Kamloops, BC. Eso es casi la mitad de la comida que compras, agrega. Dicho de otra manera, "la comida desperdiciada durante un año podría pagar las vacaciones familiares" Tienda sabiamente "Planifica tus comidas y compra los perímetros de las tiendas de comestibles en lugar de los pasillos", aconseja Dick. Ahorrarás dinero y mejorarás el medio ambiente y tu salud. Además, "compre en el refrigerador" antes de comprar más alimentos y coloque los artículos más perecederos en el frente. Cocinar comidas más pequeñas Si estás constantemente obsesionado por los fantasmas de las sobras del pasado (no estás solo), cambia a cocinar comidas más pequeñas. Excepción: las sopas, los guisos, los curris y los chiles generalmente tienen mejor sabor al día siguiente. Comience joven Tener niños pequeños en la casa significa mucha comida tirada en el piso. ¿Solución? Dele solo unos cuantos bocados a la vez en lugar de una porción, y lave y reutilice cuando sea apropiado. Involucre a su pequeño en un juego de "comida para recoger" y recompénselo con canciones y abrazos. Nunca es demasiado pronto para aprender sobre el desperdicio de comida Pequeños cambios para grandes resultados. ¿Los bocadillos y los almuerzos escolares o de trabajo se interponen en el camino de su cocina sin desperdicios? En lugar de comprar bocadillos envueltos individualmente preparados, hornee sus propias galletas o barritas energéticas. Utilice papel de cera de abejas o contenedores de acero inoxidable para el transporte. Para almuerzos en movimiento, use recipientes herméticos de acero inoxidable, ya sea en capas o divididos. "Se siente bien tener una sensación de control sobre sus elecciones de alimentos, en lugar de buscar alimentos ya empacados en la estantería del supermercado", dice Papania. La compra a granel le permite cambiar la proporción de producto a empaque a favor del primero, dice. El consejo de Papania: "Siempre busque mejores alternativas, idealmente locales". En la era de la información, las tiendas de comestibles se adaptan rápidamente a las sugerencias de los consumidores y ofrecen productos y servicios que abordan cuestiones ambientales y éticas. Suelta los envases innecesarios. Elija las latas de vidrio o sin bisfenol A sobre el plástico siempre que sea posible. Pruebe el yogur casero o el kéfir para evitar el plástico (todo lo que necesita para el yogur son frascos de vidrio, cultivo de bacterias, leche y un horno). Compre en la carnicería local para evitar las bandejas de espuma de poliestireno. "Evita las frutas y verduras envasadas, que a menudo se echan a perder más rápido, y las compras de forma individual", sugiere Papania. La reutilización y reutilización vienen antes del reciclaje. Tienda a granel Busque en la sección de productos a granel antes de comprar alimentos envasados. Las bolsas de café multicapa se pueden convertir en bolsas de compra o reciclarse a través de TerraCycle, una compañía que recicla los "no reciclables" a través de varias cadenas de tiendas. Repensar los suministros de limpieza Reemplace las toallas de papel con toallas de algodón lavables, use esponjas biodegradables y cepillos para platos, y haga sus propios artículos de limpieza (reutilice las botellas de rociado si están limpias y es seguro hacerlo). Una cocina sin desperdicios es una aventura valiosa que te conecta con la naturaleza y desata creatividad. ¡Diviértete haciéndolo! Pruebe estos consejos para ayudarlo a usted y a su familia a evitar el desperdicio de alimentos. Servir porciones más pequeñas (que también incluye bebidas). Congelar los restos de vegetales para las acciones. Compost. Recuerde que "el mejor antes" no siempre es igual a una fecha de vencimiento estricta. Congela lo que compraste en exceso en lugar de tirar. Etiquete los alimentos (sí, incluso la mitad de un sándwich) o tenga una sección especial para consumo inmediato. Diálogo de Canadá sobre residuos plásticos Menos del 10 por ciento de todos los plásticos se reciclan a nivel mundial, mientras que aproximadamente 8 millones de toneladas anuales se suman a los 150 millones de toneladas existentes en el océano. La buena noticia: el Ministerio de Medio Ambiente y Cambio Climático ha iniciado el Diálogo de Canadá sobre Desechos Plásticos, con el objetivo de reducir la basura marina y lograr cero desperdicios en plásticos en Canadá. Todos los canadienses están invitados a compartir ideas en línea o por correo electrónico. Además, las industrias canadienses de plástico y química se comprometieron a hacer que todos los envases de plástico sean reciclables y recuperables para 2030. Una nota sobre la congelación. ¡Ve más allá de las bolsas de plástico! Use frascos de vidrio para frijoles secos cocidos (escurridos) y otras verduras. Para sopas, caldos y guisos (que se expandirán durante la congelación), deje el espacio de cabeza en la parte superior. Artículo Original

¿Cuánto tiempo dura la basura?

Publicado 07/10/2018
Sin la intervención del ser humano, en la naturaleza no existiría la basura. Todos los elementos cumplen una función y son reutilizados de alguna manera para su aprovechamiento en distintas etapas y de forma cíclica. Un chicle o una lata, sin embargo, no pueden participar de este ciclo cuando quedan abandonados en el campo y permanecen ahí por años e incluso, en algunos casos, hasta por siglos. Toda esta basura, sin su correcta gestión de residuos, representan uno de los problemas de contaminación más importantes ante los que se enfrenta el planeta. En el peor de los casos, pueden introducirse en la cadena alimentaria de aves o peces y de la que los humanos formamos parte.
Los datos, tremendamente alarmantes, hablan por sí solos: 4,8 millones de toneladas de plástico tiradas en tierra terminan en el mar cada año; como consecuencia, al menos 267 especies han sufrido enredos en desechos plásticos o los han tragado, según Naciones Unidas, y se estima que en 2050 el 99 % de las aves marinas habrán ingerido algún tipo de basura tóxica. Por esta razón, es importante que la sociedad apueste por reutilizar o reciclar el plástico que se utiliza. Vamos a ver cómo afectan algunos de estos deshechos abandonados en la naturaleza: Colillas: 10 años Que no nos engañe su tamaño, cada colilla abandonada en la playa o en el campo es un residuo dañino que contamina el medio ambiente de múltiples formas y que dura hasta 10 años. Según la ONG SEO/Birdlife, una sola colilla puede contaminar entre 8 y 10 litros de agua. Pero eso no es todo, porque además podría terminar en el estómago de algún animal, que no será capaz de digerirlo… Latas: hasta 100 años Las latas de refrescos o de conservas están fabricadas de aluminio, un material que puede tardar entre 10 y 100 años en degradarse, dependiendo de su espesor, y que genera óxido de hierro, por lo que es importante su reciclaje. Además, especies como las tortugas marinas o numerosas aves pueden ver amenazada su supervivencia cuando quedan enganchadas a las anillas de estos envases. Plásticos: hasta 1.000 años En esta categoría podemos encontrar múltiples formatos y variantes invadiendo campos y océanos del planeta, lo que ya se conoce como islas de basura. Las botellas de agua, por ejemplo, se llevan la palma en lo que a longevidad se refiere, ya que numerosos estudios sugieren que pueden tardar hasta 1.000 años en degradarse.
Durante todo este tiempo el sol es capaz de agrietar y romperlas en fragmentos, convirtiendo cada envase en una acumulación de microplásticos que tanto aves como peces terminan en muchas ocasiones ingiriendo. Los chicles, por su parte, están compuestos por un 80 % de plástico. A pesar de lo insignificantes que parecen, se estima que necesitan alrededor de 5 años para desaparecer y de nuevo se trata de uno de los residuos que con más frecuencia las especies confunden con comida. Vidrio: hasta 4.000 años 4.000, esta es la friolera de años que tarda una botella de vidrio en descomponerse en la naturaleza. Cada vez que dejamos un recipiente de este material tirado en el campo ponemos en riego el entorno y su ecosistema. Como ocurre con muchos de los elementos anteriores, los animales pueden cortarse o ingerirlo haciendo imposible su digestión. Además, es uno de los factores de riesgo de incendio más peligrosos. Paradójicamente, siendo uno de los residuos más contaminantes y difíciles de degradar por la naturaleza, el vidrio es íntegramente reciclable, no genera residuos en el proceso y deviene en un producto de las mismas características sin perder sus propiedades, de ahí la importancia de destinar cada envase que utilizamos al reciclaje.
Solución por naturaleza Pero, ¿qué podemos hacer para reducir el problema? Una de las soluciones determinantes la encontramos copiando a la naturaleza. Ya hemos visto que ella no tira, sino que es capaz de aprovechar sus elementos y reutilizarlos. Este modelo cíclico es la inspiración para la economía circular, una de las armas más tangibles para luchar contra la contaminación de la basura. La filosofía de la economía circular es la de reducir la producción y apostar por la reutilización de los elementos que por sus propiedades no pueden volver al medio ambiente, convertir el residuo en recurso. Que cada ciudadano sienta la responsabilidad del reciclaje es otra de las claves, ya que residuos como el aluminio, el vidrio, el papel o el cartón tienen la oportunidad de una nueva vida a partir de la transformación. Pero además, existen iniciativas públicas y también privadas de empresas como Terracycle que recogen residuos difíciles de reciclar como colillas o cápsulas de café para darles una nueva utilidad. Fuente: Sostenibilidad, Artículo de referencia: https://www.sostenibilidad.com/medio-ambiente/residuos-planeta-digerir-cuanto-dura-la-basura/,

Empresa recibe colillas de cigarrillo, las transforma en plásticos y composta el tabaco

TerraCycle se propuso eliminar el concepto de ‘basura’ mediante el reciclaje de todo lo que parecería imposible de reciclar. What_happens_to_the_waste Fundada por Tom Szaky y Jon Beyer, dos estudiantes de primer año de la Universidad de Princeton, Nueva Jersey, TerraCycle nació con la idea de “desviar millones de kilogramos de desechos de vertederos e incineradores cada mes”. Desde cápsulas de café y lapiceras de las escuelas, hasta guantes de plástico utilizados en fábricas y… colillas de cigarrillo. Algo que parecería imposible de reciclar se está convirtiendo en compost y en materiales plásticos de uso industrial gracias a una compañía que se propuso encontrarle la vuelta a lo ‘no recicable’. “No hemos encontrado nada que no podamos reciclar”, dijo Albe Zakes, vicepresidente de comunicaciones de la empresa. “Los cigarrillos contienen toxinas que, cuando se tiñen, se filtran en el entorno”, explica Zakes. “Sólo se necesita una colilla para contaminar un litro de agua. Los animales también pueden confundir las colillas contaminadas con los alimentos”. cigarette_accepted-waste En este panorama, TerraCycle ha lanzado un programa mediante la cual recibe colillas de cigarrillo, esteriliza y tritura los filtros para luego mezclarlos con otros materiales reciclados y convertirlos en productos plásticos como pellets. Además, se composta el resto del tabaco, que sirve como fertilizante.   Hasta el momento, se han sumado 3108 localidades que aportan residuos de este tipo a la compañía, de manera que ya se reciclaron más de 100 000 000 colillas. En Buenos Aires IMG-20180207-WA0040 Si bien todavía no se cuenta con la tecnología necesaria para reciclarlas, la Asociación Civil Eco House ha lanzado una campaña con el nombre de #OjoConLaColilla, que busca realizar una recolección diferenciada de este tipo de residuos, para evitar que terminen en el piso, afectando a los animales y contaminando el ambiente.   Fuente: TerraCycle, Project Earth. Fuente foto: TerraCycle.

SUPRA RECICLAJE: CÓMO DAR VALOR A LOS RESIDUOS.

Supra reciclaje: cómo dar valor a los residuos.
Si aún no has oído hablar del supra reciclaje, seguro que cuando te demos la explicación sabrás qué es. Esta técnica consiste en la transformación de un residuo en otro de mayor utilidad, con el que se consiguen nuevos productos para ahorrar dinero y, por supuesto, energía, reduciendo así la contaminación. Gracias al supra reciclaje, muchos materiales consiguen obtener una segunda vida de la manera más sencilla posible, sin pasar por procesos de transformación propiamente dicho en instalaciones como pueden ser los gestores de residuos. Esta es una tendencia ecológica que reduce la cantidad de residuos y con la que se consigue un sinfín de opciones, desde objetos de adorno, pasando por moda o incluso arte con el fin de sacar el máximo partido a los metales. Existen incluso empresas que fabrican sus productos con esta materia. Un ejemplo es TerraCycle, la primera que se creó en Estados Unidos para crear complementos a base de bolsas, envoltorios, etc. cuyos productos se comercializan en otros países como Reino Unido, México o Brasil. Además, prestigiosos diseñadores han realizado lámparas con bombillas estropeadas, cartones de leche o botellas de cristal, por lo que se están creando iniciativas para que el supra reciclaje siga creciendo. En el mundo de la moda también se está convirtiendo en una tendencia muy seguida, usando tejidos antiguos para adaptarlos a las tendencias actuales mediante diversas técnicas creativas con la que cada diseñador da su toque especial. De esta manera, gracias al supra reciclaje se logra reducir los residuos generados y se genera una nueva opción de emprendimiento para negocios de decoración. Supone por lo tanto una ventaja para el medio ambiente, la economía o el arte, entre otros. Creando una corriente que consigue alargar la vida de los materiales originales y dar sostenibilidad, además de valor a lo que podría acabar siendo un desecho.

Reciclan chicles… para hacer cestos de basura

 

La empresa Trident coloca contenedores especiales en el Centro Histórico de la CDMX para poder recolectarlos con mayor facilidad

08/08/2018 09:19  ERÉNDIRA ESPINOSA
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Chicle, Trident, Reciclaje, Medio ambiente
En el Centro Histórico de la CDMX se colocaron contenedores para reciclar chicles. Foto: Pixabay
CIUDAD DE MÉXICO Dado que cada vez son más los consumidores preocupados por el medio ambiente, la marca de goma de mascar Trident lanzó unos contenedores especiales para reciclar los chicles, cuyo objetivo será transformar este producto en otros artículos, tales como cestos de basura. En México, siete de cada diez gomas de mascar que se consumen son de la marca Trident —que pertenece a Mondelēz— , que fácilmente se puede transformar en otras cosas. De acuerdo con información disponible en internet, TerraCycle, Trident y el Centro Histórico se asociaron para crear el programa de reciclaje gratuito, que se puede identificar en redes sociales con el hashtag #TiraElChicleAlBote. Te puede interesar: Chicles, reflejo de la sociedad de la Ciudad de México Con ello esperan lograr que los fanáticos de esta golosina participen activamente y lo depositen en los contenedores especiales.
Una vez recolectadas, las gomas de mascar se limpian y convierten en nuevos polímeros que serán utilizados para crear productos reciclados”, expone el sitio de TerraCycle.
Según información de Trident, el país es el segundo mercado donde más chicle se vende a escala mundial, sólo después de Estados Unidos, ya que se consumen de 200 a 210 gramos de goma de mascar por persona cada año. Mondelēz también tiene otras marcas en su portafolio, tales como Bubbaloo y Clorets: inclusive, la planta de gomas de mascar más grande del planeta opera en la República Mexicana y 7.5 de cada diez chicles consumidos son elaborados allí.  
Actualmente 50% de la producción de esta fábrica se queda en el país y el resto se va a otros mercados. Los contenedores de goma de mascar para reciclar que se pusieron a disposición de los consumidores se pueden encontrar en varios puntos del Centro Histórico de la Ciudad de México, lugar relevante si se considera que hace cinco años la calle de Madero fue noticia porque los chicles pegados en el piso eran muy difíciles de quitar, al grado que el gobierno de la ciudad tuvo que comprar diez máquinas especiales para poder retirarlos.

¿Qué están haciendo las empresas para frenar el torrente de plásticos?

Ante las consecuencias innegables de la contaminación por plásticos, personas de todo el mundo están rechazando los artículos plásticos desechables y se están comprometiendo con estilos de vida sostenibles. Los gobiernos también están actuando: más de 50 países se han unido a la campaña Mares Limpios de ONU Medio Ambiente, el mayor movimiento mundial de lucha contra la basura marina. Las empresas no pueden permitirse ignorar esta protesta pública. Muchas industrias están elaborando planes para eliminar los plásticos de un solo uso, usar más plástico reciclado en sus empaques y trabajar en un reciclaje más efectivo. La presión no proviene solo de los consumidores. Bloomberg informó en junio que un grupo de 25 inversores que administra más de US$ 1 billón en activos exigió que Nestlé, PepsiCo, Procter & Gamble y Unilever redujeran su uso de empaques plásticos. En la solicitud, respaldada por la organización sin fines de lucro As You Sow, se pidió a las empresas que divulgaran el uso anual de empaques de plástico, establecieran objetivos de reducción y facilitaran el reciclaje y la transición a empaques reciclables, reutilizables o compostables tanto como fuera posible. La necesidad de actuar urgentemente es innegable: los humanos han producido alrededor de 8.300 millones de toneladas de plástico desde la década de 1950 y se prevé que esa cifra aumente a alrededor de 34.000 millones de toneladas en 2050. Se estima que la producción de plástico crezca 40% en la próxima década, con compañías de combustibles fósiles invirtiendo miles de millones de dólares en nuevas industrias de fabricación de plástico en Estados Unidos. Las empresas que usan plásticos claramente tienen un papel fundamental que desempeñar para cambiar esta dinámica insostenible. La industria de bienes de consumo es particularmente consciente de que los clientes ya están rechazando los productos de las empresas que no evitan el uso de plástico desechable. sagar-chaudhray-606128UNSPLASH La esperanza es que esta nueva realidad pueda generar innovación y oportunidades. Ya muchas firmas, grandes y pequeñas, están haciendo cambios. Aquí hay solo algunos ejemplos: En abril, el gigante suizo de alimentos Nestlé se comprometió a que sus empaques plásticos serían 100% reciclables o reusables para 2025. La empresa quiere fomentar el uso de plásticos que permitan mejores tasas de reciclaje y eliminen o cambien las combinaciones complejas que dificultan el reciclaje. Unilever también se ha comprometido a garantizar que todos sus envases de plástico sean totalmente reutilizables, reciclables o compostables para el año 2025. Unilever respalda la iniciativa para una Nueva Economía del Plástico de la Fundación Ellen MacArthur y pretende publicar antes de 2020 toda la gama de materiales plásticos utilizados en sus procesos de embalaje para ayudar a crear un protocolo para la industria. En el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, Volvo anunció que al menos 25% de los plásticos utilizados en sus nuevos modelos de automóviles a partir de 2025 se fabricarán con materiales reciclados. El gigante de bebidas Coca-Cola, que usa alrededor de 120.000 millones de botellas al año, lanzó en enero su campaña World Without Waste y se comprometió a reciclar una botella o lata usada por cada nueva que se venda a partir de 2030. Para ese año, también prometió aumentar a 50% la cantidad de contenido reciclado en botellas de plástico y está experimentando con diferentes técnicas de recolección para reciclar sus productos, incluyendo el respaldo a los esfuerzos de los gobiernos y la industria. McDonald’s ha dicho que hará todos sus empaques a partir de fuentes renovables y reciclables para el año 2025. Dell apunta a que sus empaques no generen ningún tipo de desechos para el año 2020, utilizando materiales de fuentes sostenibles. La empresa de informática ya utiliza basura marina plástica reciclada y otros materiales como el bambú y aspira a que todos sus empaques sean finalmente aptos para el compostaje o la recolección doméstica. Evian de Danone fabricará todas sus botellas a partir de plástico reciclado para 2025. La tienda británica Iceland prometió eliminar los empaques de plástico de sus productos propios para fines de 2023. Procter & Gamble, que fabrica el champú Head & Shoulders, produjo el año pasado la primera botella de champú reciclable, fabricada con hasta 25% de plástico recuperado de playas. Además se ha comprometido a hacer que todos sus envases sean reciclables o reutilizables para el año 2030. Su marca de lavado, Fairy Liquid, ya ha producido una nueva botella de plástico, hecha con plástico 100% reciclado y 10% de basura marina plástica. Las botellas se desarrollaron en asociación con TerraCycle. La cadena de muebles sueca IKEA se ha comprometido a eliminar gradualmente los productos de plástico de un solo uso de sus tiendas y restaurantes para 2020. La firma dice que está comprometida con la eliminación de los plásticos a base de petróleo y quiere garantizar que todos sus productos de plástico estén hechos con materiales reciclados. En un informe reciente, ONU Medio Ambiente examina el potencial de reemplazar los plásticos convencionales con una gama de materiales naturales, como papel, algodón, madera, algas y hongos, y tecnologías alternativas, y biopolímeros de nueva generación fabricados a partir de fuentes de biomasa. También destaca a empresas, desde multinacionales hasta emprendimientos, que están innovando en este campo. Por ejemplo, una empresa con sede en Nueva York ha desarrollado envases compostables que utilizan desechos orgánicos y micelio fúngico. El material se puede modelar y se ha usado para enviar productos de alto valor, incluidas las computadoras Dell. El informe concluye que las empresas deben incluir la sostenibilidad en sus modelos comerciales, a veces inspirándose en las comunidades locales para encontrar alternativas al plástico disponibles a partir de plantas y animales. La innovación y el espíritu empresarial son fundamentales. Sin duda, este es precisamente el dominio en el que deben brillar las empresas líderes del mundo.

Construyen biblioteca gracias a la recolección de desechos

LOCAL, 10 de Julio.-  La separación de basura y el reciclaje son hábitos que benefician al planeta. O al menos reducen el daño que la basura causa si solamente se lleva a vertederos o se incinera.  Gracias a los programas Programa de Reciclaje de Productos de Cuidado Bucal y de Envolturas de Jabones, La Casa Vifac (Asociación Vida y Familia) Mérida reunió el dinero suficiente para construir una biblioteca en su sede de Mérida, Yucatán. Después de tres años de recolectar desechos como empaques de productos de higiene bucal y de barras de jabón, entre otros, Vifac recibió una donación de 30 mil pesos. Este tipo de desechos normalmente no se consideran como reciclables, sin embargo encontraron una empresa que recicla materiales difíciles o no convencionales y ofrece donativos a cambio. El plan original del organismo era recaudar fondos para construir una biblioteca en una escuela cercana, buscando apoyo en la misma para la recolección de la basura que se convertiría en donativo. Sin embargo, no encontraron el compromiso suficiente en las escuelas para juntar los desperdicios. Decidieron entonces tomar la oportunidad que les brindaba la empresa TerraCycle para beneficiar a su propia asociación. Las personas que están a cargo de la asociación decidieron que la biblioteca debería quedarse en sus instalaciones con el fin de incrementar el hábito de la lectura en sus beneficiarias para que éstas y sus hijos tengan acceso a mejores oportunidades.  Por medio del reciclaje incrementaron la calidad de vida de las mujeres que se acercan a recibir los servicios. Por medio de programas asociados con distintas marcas, TerraCycle otorga aproximadamente veinticinco centavos acumulables por cada pieza de reciclaje que se recolecta. Las personas que hicieron la labor de recolectar pueden elegir una organización sin fines de lucro a la cual quieran donar el dinero. Vifac y muchas organizaciones sin fines de lucro reciben donativos por estos proyectos. Actualmente la Casa Vifac Mérida tiene en sus instalaciones la Biblioteca Rosario Castellanos que pueden utilizar quienes reciben sus servicios como asociación. Los encargados de la sede de Vifac en Mérida llamaron a poder construir la biblioteca “un sueño convertido en realidad gracias a lo que llamamos basura”. Ellos transmiten el mensaje de compromiso con la sustentabilidad, con las personas y con el conocimiento con sus acciones.  Además de todo lo ya logrado, la organización seguirá recolectando desechos para financiar una beca completa (12 mil pesos) para un seminarista de los Misioneros de Guadalupe.

En Mérida se construye biblioteca gracias al reciclaje

VIFAC, asociación que apoya a mujeres embarazadas en situación de vulnerabilidad, encontró la manera de hacer que el reciclaje se convirtiera en fondos para su causa.
La separación de basura y el reciclaje son hábitos que benefician al planeta. O al menos reducen el daño que la basura causa si solamente se lleva a vertederos o se incinera. Gracias a los programas Programa de Reciclaje de Productos de Cuidado Bucal y de Envolturas de Jabones, La Casa Vifac (Asociación Vida y Familia) Mérida reunió el dinero suficiente para construir una biblioteca en su sede de Mérida, Yucatán. Después de tres años de recolectar desechos como empaques de productos de higiene bucal y de barras de jabón, entre otros, Vifac recibió una donación de 30 mil pesos. Este tipo de desechos normalmente no se consideran como reciclables, sin embargo encontraron una empresa que recicla materiales difíciles o no convencionales y ofrece donativos a cambio. El plan original del organismo era recaudar fondos para construir una biblioteca en una escuela cercana, buscando apoyo en la misma para la recolección de la basura que se convertiría en donativo. Sin embargo, no encontraron el compromiso suficiente en las escuelas para juntar los desperdicios. Decidieron entonces tomar la oportunidad que les brindaba la empresa TerraCycle para beneficiar a su propia asociación. Las personas que están a cargo de la asociación decidieron que la biblioteca debería quedarse en sus instalaciones con el fin de incrementar el hábito de la lectura en sus beneficiarias para que éstas y sus hijos tengan acceso a mejores oportunidades. Por medio del reciclaje incrementaron la calidad de vida de las mujeres que se acercan a recibir los servicios. Por medio de programas asociados con distintas marcas, TerraCycle otorga aproximadamente veinticinco centavos acumulables por cada pieza de reciclaje que se recolecta. Las personas que hicieron la labor de recolectar pueden elegir una organización sin fines de lucro a la cual quieran donar el dinero. Vifac y muchas organizaciones sin fines de lucro reciben donativos por estos proyectos. Actualmente la Casa Vifac Mérida tiene en sus instalaciones la Biblioteca Rosario Castellanos que pueden utilizar quienes reciben sus servicios como asociación. Los encargados de la sede de Vifac en Mérida llamaron a poder construir la biblioteca “un sueño convertido en realidad gracias a lo que llamamos basura”. Ellos transmiten el mensaje de compromiso con la sustentabilidad, con las personas y con el conocimiento con sus acciones. Además de todo lo ya logrado, la organización seguirá recolectando desechos para financiar una beca completa (12 mil pesos) para un seminarista de los Misioneros de Guadalupe.

ESPECIAL: NUEVA TECNOLOGÍA DE RECICLAJE CHINA AYUDA A PROTEGER EL MEDIO AMBIENTE

Por Luan Xiang
BEIJING, 29 jun (Xinhua) — Gracias a la celebración de la Copa Mundial de la FIFA, Rusia es por estos días el centro de atención para muchos fanáticos chinos del fútbol. Y a pesar de que la selección nacional no compite en el evento, China está contribuyendo con su tecnología ecológica a la segunda competencia deportiva más grande del mundo después de los Juegos Olímpicos. Una de las razones por las que destaca este Mundial en comparación con ediciones anteriores es su compromiso con el medio ambiente, como se indica en la Estrategia de Sostenibilidad promovida por la FIFA y el Comité Organizador Local de Rusia (LOC), que buscan presentar un Mundial “más ecológico y más sostenible”. “Cada uno de los 12 estadios donde se juegan los partidos cuenta con un sistema para gestionar y reciclar los desechos, lo que se espera ayude a reducir el impacto ambiental negativo”, dijo Alexey Sorokin, jefe ejecutivo del LOC, en un comunicado de prensa. Además de los contenedores de reciclaje tradicionales, llaman la atención unas máquinas de color verde ubicadas dentro de los escenarios. Son una novedad de alta tecnología para recolectar botellas plásticas, las cuales, después de un proceso de reutilización, son convertidas en camisetas y bolsos de mano. Y estas máquinas fueron hechas en China. Esta tecnología “verde” del país oriental ha sido bien recibida tanto por los ciudadanos rusos como por los aficionados al fútbol que han llegado procedentes de todo el mundo. “Voluntarios rusos guían a los espectadores en los estadios para reciclar correctamente sus botellas de plástico”, explica Liu Xuesong, vicepresidenta ejecutiva de Incom Recycle, compañía creadora y operadora del sistema de reciclaje, en una entrevista con Xinhua. Después de terminar una bebida embotellada, los espectadores pueden ubicar fácilmente una de las máquinas, depositar allí su botella vacía y obtener una recompensa. Ocho botellas pueden hacer una camiseta, y 14 de ellas un elegante bolso de mano. Tan sólo en Beijing funcionan alrededor de 5.000 máquinas de Incom como las de la Copa del Mundo. Todas están interconectadas y son monitoreadas a través de la Red. Las estadísticas de la compañía muestran que más de dos millones de personas son usuarios activos de estos dispositivos inteligentes, y que más de 54 millones de botellas de plástico PET han sido recolectadas desde 2012, lo que equivale a haberse ahorrado más de 8.100 toneladas de petróleo, haber sembrado 55.350 árboles o haber recortado las emisiones de dióxido de carbono en 4.050 toneladas. Fundada en 2003, Incom Recycle está presente en más de 21 países y regiones, proporcionando soluciones integrales para el reciclaje y la reutilización de residuos industriales y domésticos. Es uno de los varios jugadores en el negocio del reciclaje, que crece rápidamente en China. Otra empresa que está fortaleciéndose es BGG Recycle, una innovadora plataforma B2B para recursos reciclables, la cual ha demostrado que el “negocio sucio” de la gestión de residuos puede ser rentable, con un ingreso anual de 100 millones de yuanes (15 millones de dólares) en su primer año. Su fundadora, Anna Gui, quien anteriormente trabajó en Wall Street, dio vida a la empresa apoyándose en la tecnología informática para abordar el problema del desperdicio de envases, que en China se ve agravado por el rápido desarollo del comercio electrónico. La práctica aplicación de BGG conecta a los edificios de oficinas y las empresas con los recolectores, y después de ser clasificados, los recursos recolectados son vendidos a las fábricas como materia prima. “Nuestra visión es poner recursos limitados en un círculo infinito de sostenibilidad a través de la innovación”, comenta Gui a Xinhua. El sector siempre ha sido rentable en el país, a pesar de que los recicladores de basura a menudo son despreciados y se subestima su contribución a la protección del medio ambiente. Al eliminar a los intermediarios y aumentar la eficiencia de la recolección con la tecnología informática más avanzada, BGG ha ayudado a elevar la tasa de reciclaje desde el 10 hasta el 20 por ciento en nueve ciudades chinas, donde ha proporcionado soluciones completas y personalizadas. Además, los recicladores que trabajan con la plataforma han visto duplicar sus ingresos, asegura Gui. “Soy optimista en cuanto a que nuestro negocio llegará a más de 50 ciudades en tres años. Brindaremos servicios a más de 50.000 pequeñas empresas y colaboraremos con más de 100.000 recicladores”, añade. BGG espera recaudar 1.000 millones de yuanes en 2018 con la implementación de más programas en todo el país. Además de los jugadores nacionales, China también dio la bienvenida a TerraCycle, una empresa de gestión de residuos con sede en Trenton, Nueva Jersey, y que ganó un premio de la ONU, para ayudar a combatir la contaminación por plásticos en el país. TerraCycle llegó al país en 2016 con un programa patrocinado por Colgate para reciclar tubos de pasta de dientes y cepillos usados. Desde entonces, ha recolectado 63.000 piezas de desechos de cuidado oral de los consumidores chinos. Recientemente se lanzó un concurso entre las escuelas primarias de Shanghai para que los niños reciclen los desechos de la higiene bucal y obtengan votos para dibujos hechos por ellos mismos con el tema de “El Futuro Verde”. La escuela ganadora recibirá como premio una impresora 3D. “No tendremos un futuro ecológico sin un entorno limpio y saludable; ese es el mensaje educativo que queremos enviar”, dice Tom Szaky, fundador y gerente de TerraCycle. La compañía nació en 2001, cuando Szaky, entonces estudiante de primer año en la Universidad de Princeton, y un amigo crearon un fertilizante orgánico a base de excrementos de gusanos alimentados con desperdicios. Hasta la fecha, más de 80 millones de personas en 21 países han ayudado a recolectar y reciclar desechos suficientes para recaudar más de 21 millones de dólares para obras de caridad en todo el mundo. El año pasado, TerraCycle creó una botella de champú reciclable para la marca Head & Shoulders de Procter & Gamble (P&G) con desechos de plástico recolectados en playas, ríos y otros cuerpos de agua de todo el planeta. En octubre, el proyecto ganó el premio Momentum for Change – Lighthouse Activities de las Naciones Unidas. TerraCycle intenta cambiar la idea sobre los desechos de tres maneras: reciclar todo, incluidas colillas de cigarrillos y envoltorios de dulces; hacer productos con los desechos, como cubos o baldes de playa; y cerrar el ciclo de reciclaje. La llegada de TerraCycle a China “es una gran oportunidad”, asegura Szaky. “El problema del desperdicio causado por el consumismo en realidad ha venido aumentando la conciencia social sobre este problema, lo que significa que la gente está dispuesta a enfrentarlo y trabajar para resolverlo”, añade. “El gobierno ha sido un gran apoyo para los negocios ecológicos y sostenibles”, complementa, y destaca el hecho de que China lidera al mundo en producción de energía eólica y solar. Desde 2012 China viene apoyando las industrias de conservación de energía y protección ambiental (ECEP, según sus siglas en inglés), que son consideradas como uno de los siete pilares estratégicos emergentes de la economía. En su XIII Plan Quinquenal de Desarrollo Económico y Social se estableció el objetivo de aumentar el valor agregado de las industrias de ECEP para que eventualmente lleguen a aportar el 3 por ciento del PIB en 2020. Además, el Gobierno ha otorgado apoyo fiscal y tributario a la investigación tecnológica y a las empresas que brindan soluciones, productos y servicios para el desarrollo “verde”. Alentado por las políticas preferenciales y la creciente demanda, el negocio del reciclaje en China recibe un número cada vez mayor de jugadores. “La gestión de residuos es crucial para el bienestar público y la protección del medio ambiente. Sin embargo, muchas empresas nuevas, a pesar de tener ideas nobles e ingeniosas, han fracasado, porque para las pequeñas empresas es difícil mantener un margen de beneficios, especialmente al principio”, dice Mao Da, de la Universidad Normal de Beijing, y quien es experto en historia ambiental y fundador de la Alianza Cero Residuos de China, un grupo de expertos no gubernamental. TerraCycle mantuvo un margen de ganancias del 1 por ciento durante más de una década. En 2017, las cifras de ventas de la compañía superaron los 20 millones de dólares. “Estamos cambiando los hábitos de las personas. Hacer que la gente se preocupe por el reciclaje es nuestro mayor desafío”, asegura Tom Szaky. “Una de las cosas más importantes que hacemos es educar: concientizamos sobre el problema y le hacemos saber a la gente que el medio ambiente vale la pena el costo”, agrega. La compañía también ofrece algunos incentivos, por ejemplo, los consumidores pueden obtener puntos de TerraCycle en función de cuánto han reciclado, y convertir los puntos en donaciones en efectivo a organizaciones de caridad. Pero cambiar los hábitos de las personas a través de la educación puede tomar demasiado tiempo para abordar el crítico problema de la contaminación, sostiene Liu Xuesong, de Incom Recycle. Liu instó a las autoridades a utilizar procedimientos legales para determinar las responsabilidades de los productores en el proceso de reciclaje. “Hasta donde sabemos, más de 50 países y regiones de todo el mundo han implementado leyes y reglamentos para establecer obligaciones de reciclaje a los productores”, comenta. En países como Alemania, Australia y Lituania, los consumidores pagan un depósito por productos reciclables desechables, y el depósito se les devuelve cuando se recicla la botella de refresco, la lata o la caja de cartón. “Esta ha demostrado ser la forma más efectiva de elevar la tasa de reciclaje a un promedio del 95 por ciento”, dice Liu. A comienzos de este año, la Unión Europea anunció una estrategia que busca que para el año 2030 todos los envases de plástico utilizados por las empresas que tienen negocios allí sean reciclables. Multinacionales como Coca-Cola, P&G y Colgate a menudo son criticadas por producir enormes cantidades de desechos de envases. Una vez se anunció la decisión, las compañías se comprometieron a cumplir con ella. “Los productores deben ser responsables y desempeñar un papel más importante en el reciclaje de sus envases desechables”, afirma Liu. “Una vez que la tasa de reciclaje aumente, tenemos la tecnología y la capacidad para convertir los residuos en recursos valiosos, y entonces la contaminación con plásticos dejará de crecer”, añade. Incom Recycle se ha asociado con Coca-Cola para reciclar sus envases descartados en China. Otro desafío es cambiar el sesgo de la sociedad hacia los profesionales del reciclaje y atraer a más talentos, advierte, a su vez, Anna Gui. “Muchas personas talentosas no consideran el reciclaje como una carrera, y los recicladores experimentados están acostumbrados a trabajar por su cuenta. Tomará algún tiempo para que este sector, ya existente, reconozca nuestros valores modernos”, agrega. Para la empresaria, “el futuro de esta industria radica en la transformación inteligente de las prácticas antiguas”. Por eso considera que “un sistema inteligente de reciclaje y reutilización es inevitable”, y que “es necesario monitorear todo el proceso, desde donde se producen los desechos hasta las compañías de procesamiento de residuos.