Madrid, 8 dic (EFE).- Millones de colillas de cigarros se esparcen por las aceras o, peor aún, por parques y playas. Esos escuetos filtros, de apariencia inocua, son un residuo contaminante porque están formados de acetato de celulosa, derivados del petróleo, no biodegradables, y pueden tardar años en descomponerse.
Sus efectos han sido estudiados principalmente sobre la salud humana, sin embargo, no es menos perjudicial para el medio ambiente, porque también las colillas contienen toxinas peligrosas, después de haber sido utilizadas.
- on un residuo contaminante, formado de acetato de celulosa y derivados del petróleo, y pueden tardar años en descomponerse.
- Según un estudio de Greenpeace, el 50% del contenido de alquitrán del cigarro se queda en los filtros, que en el medio ambiente generan sustancias cancerígenas.
- En España, se ha puesto en marcha un sistema para reutilizar las colillas como abono natural para la agricultura.
- Son un residuo contaminante, formado de acetato de celulosa y derivados del petróleo, y pueden tardar años en descomponerse.
- Según un estudio de Greenpeace, el 50% del contenido de alquitrán del cigarro se queda en los filtros, que en el medio ambiente generan sustancias cancerígenas.
- En España, se ha puesto en marcha un sistema para reutilizar las colillas como abono natural para la agricultura.
Madrid, 8 dic (EFE).- Millones de colillas de cigarros se esparcen por las aceras o, peor aún, por parques y playas. Esos escuetos filtros, de apariencia inocua, son un residuo contaminante porque están formados de acetato de celulosa, derivados del petróleo, no biodegradables, y pueden tardar años en descomponerse.
Millones de colillas de cigarros se esparcen por las aceras o, peor aún, por parques y playas. Esos escuetos filtros, de apariencia inocua, son un residuo contaminante porque están formados de acetato de celulosa, derivados del petróleo, no biodegradables, y pueden tardar años en descomponerse.
Millones de colillas de cigarros se esparcen por las aceras o, peor aún, por parques y playas. Esos escuetos filtros, de apariencia inocua, son un residuo contaminante porque están formados de acetato de celulosa, derivados del petróleo, no biodegradables, y pueden tardar años en descomponerse.
Madrid, 8 dic (EFE).- Millones de colillas de cigarros se esparcen por las aceras o, peor aún, por parques y playas. Esos escuetos filtros, de apariencia inocua, son un residuo contaminante porque están formados de acetato de celulosa, derivados del petróleo, no biodegradables, y pueden tardar años en descomponerse.
EFE
- Son un residuo contaminante, formado de acetato de celulosa y derivados del petróleo, y pueden tardar años en descomponerse.
- Según un estudio de Greenpeace, el 50% del contenido de alquitrán del cigarro se queda en los filtros, que en el medio ambiente generan sustancias cancerígenas.
- En España, se ha puesto en marcha un sistema para reutilizar las colillas como abono natural para la agricultura.
Millones de colillas de cigarros se esparcen por las aceras o, peor aún, por parques y playas. Esos escuetos filtros, de apariencia inocua, son un residuo contaminante porque están formados de acetato de celulosa, derivados del petróleo, no biodegradables, y pueden tardar años en descomponerse.
Proyecto pionero en España de reciclado de cigarrillos
British American Tobacco (BAT) pondrá en marcha en España el primer proyecto de reciclado de residuos de cigarrillos de Europa, con el fin de que puedan ser reutilizados como materia prima en la producción de materiales y elementos que tengan una nueva vida útil, ha informado este lunes la compañía tabaquera.
Así, la ceniza y los residuos de tabaco se convertirán en fertilizantes y abonos naturales para la agricultura; el papel que rodea al filtro en nuevo papel o cartón reciclado; y el filtro, en elementos plásticos de uso industrial como palés, o de uso cotidiano como carcasas de bolígrafos o nuevos embalajes.