En este inicio de año, la empresa TerraCycle México quiere qué más personas participen en sus programas de recolección de desechos.
Enero 2012, Monterrey, Nuevo León, México.- TerraCycle México es una empresa que pone a la disposición de la comunidad sus programas nacionales de Brigadas, a través de las cuales la gente puede recolectar desechos y generar fondos para distintas causas sociales, iglesias e instituciones sin fines de lucro. Por cada unidad de desecho recolectada, se donan $0.25MN para apoyar económicamente a las causas ya mencionadas.
A las brigadas de recolección de desechos se pueden unir empresas, escuelas, grupos de personas e incluso, participar individualmente.
Los donativos son posibles gracias a las alianzas que TerraCycle tiene con distintas empresas multinacionales como Kraft, Bimbo, Colgate y PepsiCo, las cuales se preocupan por cuidar el medio ambiente y buscan reciclar los desechos que sus productos generan.
Actualmente, TerraCycle México lleva $1, 187,561.19 fondos donados, 11, 565,847 unidades de desecho recolectadas y 1, 247,401 personas que ya se han unido a las brigadas y están participando enviado sus desechos.
TerraCycle México ayuda a combatir la pobreza gracias a los puntos que se acumulan por la recolección de desechos de cada brigada, tiene Organizaciones registradas como Fundación Tarahumara José A. Llaguno A.B.P donde el brigadista puede donar sus puntos a esta causa social.
Este año lanza su nuevo canje de puntos por recolección de desechos de sobres y envolturas.
http://www.terracycle.com.mx/es-MX/points.html
De esta manera, TerraCycle se encarga de darle una segunda vida a todas las unidades recolectadas a nivel nacional, utilizando el material para crear nuevos productos eco amigables como bolsas, mochilas, botes, bancas, entre otros.
Inscríbete a las brigadas en www.terracycle.mx o marcando al 01 800 681 1589,
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Sobre TerraCycle
TerraCycle (www.terracycle.net) es una compañía que representa a una nueva generación poniendo un especial interés en causas sociales y el impacto ambiental. En 2001, el estudiante universitario Tom Szaky fundó TerraCycle con la esperanza de construir una nueva y más responsable forma de hacer negocios. Desde entonces, TerraCycle ha revolucionado la industria haciendo productos respetuosos del medio ambiente y al alcance de sus consumidores y a partir de materiales de desecho.
TerraCycle proporciona gratuitamente los fondos para recaudación en las escuelas, iglesias y organizaciones (sin fines de lucro), e inspira a niños por toda la nación para hacer la diferencia y generar conciencia ecológica. Únete a la eco-revolución TerraCycle registrándote gratuitamente a los programa donde recibirás una remuneración económica por recolectar los empaques de botanas, galletas, bolsas de pan, sobres de bebidas en polvo y artículos de cuidado bucal. Para aprender más sobre cómo formar parte de una Brigada de TerraCycle en alianza con Kraft, Bikbo, Colgte y PepsiCo, visita www.terracycle.com.mx o escribe a atencionalconsumidor@terracycle.com.mx
Las colillas son tratadas para terminar convertidas en plástico
Santiago de Chile.- Una buena noticia para los fumadores. Las colillas de los cigarrillos pueden ser reutilizadas. Aunque eso no quiere decir que esté bien fumar.
De hecho, el programa de reciclaje de las colillas de cigarrillos tiene apoyo de las tabacaleras en los Estados Unidos.
Se trata de una iniciativa desarrollada por una empresa canadiense llamada Terra Cycle. Esta compañía se especializa en el reciclado de distinto tipo de basura. De hecho, en distintos países realizan campañas con los envases de distintos productos como de la realización de bolsos y carteras con embalajes de jugo en polvo.
El programa de reutilización de colillas de cigarrillo empezó el año pasado en Canadá, pero luego se replicó en Estados Unidos y en España
El programa comienza cuando cientos de voluntarios, comienzan a recorrer las calles y ceniceros para recoger cada una de las colillas que los fumadores dejan tiradas. Luego, las colillas de cigarrillo son tratadas de manera tal, que se termina por convertir en plástico.
El plástico se obtiene de las colillas pasan por un proceso de higiene, luego, se separa material que está hecho el filtro (acetato de celulosa) y se funde. El plástico permite realizar nuevos paquetes y embalajes. Además se pueden realizar elementos que sirven para el transporte o la producción como tarimas de embarque, tablas de “madera plástica” e incluso rieles para trenes
Idea novedosa
La empresa Terra Cycle, tiene una novedosa propuesta que puede resultar bastante práctica, en lo personal creo que puede ser una buena idea para ser trabajada por las escuelas. El método es el siguiente. En una caja, se separa el tipo de basura que se piensa reciclar, en este caso cigarrillos, pero en la página web se encuentran otros proyectos.
Una vez que se juntan los residuos, se informa a Terra Cycle y estos pasan a retirar los residuos a través de un correo privado, sin ningún tipo de costo.
Finalmente, se recibe una suma monetaria a cambio, que será destinada a una organización o institución solidaria que se pacta en el momento en que comienzas a transitar el camino del reciclaje de basura.
Casi 100,000 brigadistas mexicanos se han sumado de manera proactiva a tomar acción a favor de la cultura del reciclaje y cuidado del medio ambiente en el país, logrando recolectar más de un millón de empaques en el primer año de la alianza entre TerraCycle y PepsiCo México.
A la fecha, en México se han inscrito más de 1700 equipos de recolección, formados por grupos de consumidores, familias, organizaciones de la sociedad civil, empresas e individuos brigadistas que tendrán laposibilidad de elegir una organización sin ánimo de lucro para destinar el donativo que PepsiCo México otorga a través de sus brigadas de botanas y galletas por cada empaque recolectado.
El director general de TerraCycle México-Centro América, Isaac Arjona, declaró que “en TerraCycle nos sentimos muy orgullosos de afirmar que la Brigada de Empaques de Botanas Sabritas es una de las más exitosas y de mayor crecimiento en un corto período de tiempo después de su lanzamiento, entre las 70 brigadas que lidera TerraCycle en los 22 países donde opera. Nos sorprende y alegra la participación natural y proactiva que los mexicanos han tenido frente a este tema y esto nos motiva aún más a seguir promoviendo la cultura de reciclaje en México”.
Mediante esta alianza se pusieron en marcha programas gratuitos de recolección de empaques de botanas y galletas -operados por Terracycle y financiados por PepsiCo México a través de sus marcas Sabritas, Gamesa y Quaker-, que los consumidores mexicanos han aprovechado para evitar que estos materiales terminen en el relleno sanitario, dándose de alta como brigadistas. ”Para la marca Sabritas es un honor apoyar las causas que movilizan a los mexicanos. Eliminar la idea de la basura es un tema que interesa a los consumidores y en el que están dispuestos a participar. Es sorprendente ver cómo con acciones tan sencillas como poner indicaciones visibles en nuestros empaques, las personas ya están entrando proactivamente a la página de TerraCycle a inscribirse como brigadistas y están influenciando a otros a sumarse a recolectar empaques de toda la categoría de botanas. Aplaudimos este ánimo de nuestros consumidores y estamos dispuestos a seguir apoyándolos”, añadió Isaías Martínez, director de Mercadotecnia de Sabritas.
TerraCycle recolecta el material de empaque pre-consumo de PepsiCo México, junto con los desechos de post-consumo, para transformarlo en productos upcycle, es decir, productos que se fabrican usando como insumo principal los empaques recolectados y se convierten en botes de basura, mesas y sillas, o productos divertidos como mochilas y lapiceras, entre otros artículos o productos. Reconociendo el gran esfuerzo y espíritu de los consumidores mexicanos, TerraCycle y PepsiCo México, a través de sus marcas Sabritas, Cheetos, Ruffles, Mafer, Gamesa y Quaker, se comprometen a seguir promoviendo estos programas orientados a eliminar la idea de la basura, como un elemento clave para sumar a los esfuerzos por promover la cultura ambiental en México.
Trenton, EU.- Sentado en su oficina en Trenton (Nueva Jersey, este de Estados Unidos), Tom Szaky es un exitoso joven presidente de una empresa que ha lanzado el primer programa de reciclado de colillas de cigarrillo exportado al mundo.
Lanzado en Canadá en mayo, ampliado luego a Estados Unidos y a España, el programa de su empresa TerraCycle asegura la recolección de colillas a través de voluntarios y su transformación en plástico, utilizado luego para nuevos productos, entre ellos, ceniceros.
El principio es el mismo sea cual sea el país: los voluntarios (personas, empresas, asociaciones de defensa del medio ambiente) recogen las colillas y las envían a la sede nacional de TerraCycle, que paga incluso el costo del paquete.
Las cenizas son luego esterilizadas y disecadas, con lo cual el papel y el tabaco se mezclan, y el acetato de celulosa utilizado en el filtro -un material plástico- es fundido y reutilizado para fabricar todo tipo de nuevos productos que son comercializados.
El programa, subraya a la AFP Tom Szaky, es pagado por la industria tabacalera, feliz de mostrar una buena acción ante la opinión pública. Y los voluntarios reciben puntos que pueden utilizar para financiar proyectos en escuelas o asociaciones caritativas.
El reciclado de colillas no es la primera operación lanzada por TerraCycle, una empresa que desde hace diez años se especializa en el reciclado y el "transciclado" (transformación de un objeto reciclado en algo nuevo y de valor superior, según su definición) de unos sesenta desechos diferentes.
Entre estos se encuentran paquetes de jugos de fruta, botellas plásticas, bolígrafos, cápsulas de café, envoltorios de bombones y cepillos de dientes.
El éxito de la empresa ha superado las expectativas.
"Hemos recuperado muy rápido más de un millón de cigarrillos. Organizaciones formidables han garantizado la recolección. Y la industria tabacalera mostró tanto entusiasmo que lanzó el programa en Estados Unidos y España", explica.
"En los próximos cuatro meses será lanzado Francia, Alemania, Suiza, Austria, Noruega, Dinamarca, Suecia, Finlandia y quizás México", agrega este joven de 30 años nacido en Hungría y criado en Canadá.
Una grave fuente de contaminación
Para fabricar un cenicero hacen falta entre 1.000 y 2.000 colillas y para una silla de plástico de jardín más de 200.000, según sus cálculos.
Los cigarrillos constituyen la principal fuente de desechos en el mundo, el 37% de todo lo que la gente tira, subraya Szaky.
Y como este joven empresario adora los desafíos, encontrar una solución para reciclarlos era uno de sus tres objetivos para 2012, junto con las gomas de mascar y los pañales usados.
"Cuando fuimos a ver a la industria tabacalera y les mostramos el plástico que hacemos a partir de sus colillas, no lo podían creer. Se comprometieron no solo a pagar el programa sino también a promoverlo", recuerda.
Para la recolección, TerraCycle se apoyó en un modelo de "brigadas" ya ensayado en 60 acciones lanzadas anteriormente, y que se llevan a cabo en 22 países por 35 millones de personas, en su mayoría mujeres y niños (que no se ocupan de las colillas).
El programa de recolección de gomas de mascar será lanzado en Brasil y el de pañales usados en Estados Unidos.
Al igual que con el tabaco, empresas vinculadas a ciertos desechos financian el reciclado: en Estados Unidos, Old Navy (indumentaria) se asoció para las chanclas y Colgate para los cepillos de dientes.
Tom Szaky, cuya empresa emplea a un centenar de personas en el mundo, espera llegar en 2013 a nuevos países de Europa Oriental y América Latina.
"Quiero arreglar todos los problemas de desechos que existen, empezando por los productos que se piensa que no pueden ser reciclados", concluye.
Sentado en su oficina en Trenton (Nueva Jersey, este de Estados Unidos), Tom Szaky es un exitoso joven presidente de una empresa que ha lanzado el primer programa de reciclado de colillas de cigarrillo exportado al mundo.
Lanzado en Canadá en mayo, ampliado luego a Estados Unidos y a España, el programa de su empresa TerraCycle asegura la recolección de colillas a través de voluntarios y su transformación en plástico, utilizado luego para nuevos productos, entre ellos, ceniceros.
El principio es el mismo sea cual sea el país: los voluntarios (personas, empresas, asociaciones de defensa del medio ambiente) recogen las colillas y las envían a la sede nacional de TerraCycle, que paga incluso el costo del paquete.
Las cenizas son luego esterilizadas y disecadas, con lo cual el papel y el tabaco se mezclan, y el acetato de celulosa utilizado en el filtro -un material plástico- es fundido y reutilizado para fabricar todo tipo de nuevos productos que son comercializados.
El programa, subraya a la AFP Tom Szaky, es pagado por la industria tabacalera, feliz de mostrar una buena acción ante la opinión pública. Y los voluntarios reciben puntos que pueden utilizar para financiar proyectos en escuelas o asociaciones caritativas.
El reciclado de colillas no es la primera operación lanzada por TerraCycle, una empresa que desde hace diez años se especializa en el reciclado y el "transciclado" (transformación de un objeto reciclado en algo nuevo y de valor superior, según su definición) de unos sesenta desechos diferentes.
Entre estos se encuentran paquetes de jugos de fruta, botellas plásticas, bolígrafos, cápsulas de café, envoltorios de bombones y cepillos de dientes.
El éxito de la empresa ha superado las expectativas.
"Hemos recuperado muy rápido más de un millón de cigarrillos. Organizaciones formidables han garantizado la recolección. Y la industria tabacalera mostró tanto entusiasmo que lanzó el programa en Estados Unidos y España", explica.
"En los próximos cuatro meses será lanzado Francia, Alemania, Suiza, Austria, Noruega, Dinamarca, Suecia, Finlandia y quizás México", agrega este joven de 30 años nacido en Hungría y criado en Canadá.
Una grave fuente de contaminación Para fabricar un cenicero hacen falta entre 1.000 y 2.000 colillas y para una silla de plástico de jardín más de 200.000, según sus cálculos.
Los cigarrillos constituyen la principal fuente de desechos en el mundo, el 37% de todo lo que la gente tira, subraya Szaky.
Y como este joven empresario adora los desafíos, encontrar una solución para reciclarlos era uno de sus tres objetivos para 2012, junto con las gomas de mascar y los pañales usados.
"Cuando fuimos a ver a la industria tabacalera y les mostramos el plástico que hacemos a partir de sus colillas, no lo podían creer. Se comprometieron no solo a pagar el programa sino también a promoverlo", recuerda.
Para la recolección, TerraCycle se apoyó en un modelo de "brigadas" ya ensayado en 60 acciones lanzadas anteriormente, y que se llevan a cabo en 22 países por 35 millones de personas, en su mayoría mujeres y niños (que no se ocupan de las colillas).
El programa de recolección de gomas de mascar será lanzado en Brasil y el de pañales usados en Estados Unidos.
Al igual que con el tabaco, empresas vinculadas a ciertos desechos financian el reciclado: en Estados Unidos, Old Navy (indumentaria) se asoció para las chanclas y Colgate para los cepillos de dientes.
Tom Szaky, cuya empresa emplea a un centenar de personas en el mundo, espera llegar en 2013 a nuevos países de Europa Oriental y América Latina.
"Quiero arreglar todos los problemas de desechos que existen, empezando por los productos que se piensa que no pueden ser reciclados", concluye.
TerraCycle, la empresa que recolecta y recicla más de 60 tipos de desechos difíciles de reciclar alrededor del mundo, suma un nuevo desafío: las colillas de cigarrillos. Con operaciones en 22 países, incluyendo Argentina, TerraCycle planea continuar su expansión transformando desechos.
Tom Szaky es el joven CEO y fundador de la empresa ambiental y social TerraCycle. Desde allí, ideó y lanzó el primer programa de recolección y reciclado de colillas de cigarrillo exportado al mundo. Lanzado en Canadá en mayo, ampliado luego a Estados Unidos y a España, el programa de TerraCycle asegura la recolección de colillas a través de voluntarios y su transformación en plástico, utilizado luego para nuevos productos, entre ellos, ceniceros.
La recolección de las colillas de cigarrillo se realiza gracias a los voluntarios (personas, empresas, asociaciones de defensa del medio ambiente) que las acumulan y las envían a la sede nacional de TerraCycle, que paga el costo del envío desde cualquier parte del país. Los voluntarios, además, reciben puntos que pueden utilizar para financiar proyectos de distintas organizaciones sociales o escuelas.
Las cenizas de las colillas recolectadas son luego esterilizadas y disecadas, con lo cual el papel y el tabaco se mezclan, y el acetato de celulosa utilizado en el filtro -un material plástico- es fundido y reutilizado para fabricar todo tipo de nuevos productos que son comercializados. Según sus cálculos, para fabricar un cenicero hacen falta entre 1.000 y 2.000 colillas y para una silla de plástico de jardín más de 200 mil.
El programa, dice Tom Szaky, es pagado por la industria tabacalera, feliz de mostrar una buena acción ante la opinión pública. "Cuando fuimos a ver a la industria tabacalera y les mostramos el plástico que hacemos a partir de sus colillas, no lo podían creer. Se comprometieron no sólo a pagar el programa sino también a promoverlo", recuerda.
Los cigarrillos constituyen la principal fuente de desechos en el mundo, el 37% de todo lo que la gente tira, subraya Szaky. Y como este joven empresario adora los desafíos, encontrar una solución para reciclarlos era uno de sus tres objetivos para 2012, junto con las gomas de mascar y los pañales usados.
El reciclado de colillas no es la primera operación lanzada por TerraCycle, una empresa que desde hace diez años se especializa en la recolección y el reciclado de desechos difíciles de reciclar, con al menos unos 60 desechos diferentes recolectados, en 22 países del mundo. Entre estos se encuentran sobres de bebidas en polvo, empaques de golosinas, bolígrafos, cápsulas de café, envoltorios de galletas y cepillos de dientes. El primer programa de recolección de gomas de mascar será lanzado en Brasil y el de pañales usados en Estados Unidos.
Al igual que con el tabaco, empresas vinculadas a ciertos desechos financian el reciclado: en cuatro paises PepsiCo se asoció con TerraCycle para reciclar las bolsitas de snacks y en otros cuatro países los hizo Colgate, para los cepillos de dientes.
Tom Szaky, cuya empresa emplea a un centenar de personas en el mundo, espera llegar en 2013 a nuevos países de Europa Oriental y América Latina, como por ejemplo Colombia. En la región, TerraCycle ya tiene operaciones en Argentina, Brasil y México.
"Quiero arreglar todos los problemas de desechos que existen, empezando por los productos que se piensa que no pueden ser reciclados", concluye.
TerraCycle asegura la recolección de colillas a través de voluntarios y su transformación en plástico
Sentado en su oficina en Trenton (Nueva Jersey, este de Estados Unidos), Tom Szaky es un exitoso joven presidente de una empresa que ha lanzado el primer programa de reciclado de colillas de cigarrillo exportado al mundo.
Lanzado en Canadá en mayo, ampliado luego a Estados Unidos y a España, el programa de su empresa TerraCycle asegura la recolección de colillas a través de voluntarios y su transformación en plástico, utilizado luego para nuevos productos, entre ellos, ceniceros.
El principio es el mismo sea cual sea el país: los voluntarios (personas, empresas, asociaciones de defensa del medio ambiente) recogen las colillas y las envían a la sede nacional de TerraCycle, que paga incluso el costo del paquete.
Las cenizas son luego esterilizadas y disecadas, con lo cual el papel y el tabaco se mezclan, y el acetato de celulosa utilizado en el filtro -un material plástico- es fundido y reutilizado para fabricar todo tipo de nuevos productos que son comercializados.
El programa, subraya a la AFP Tom Szaky, es pagado por la industria tabacalera, feliz de mostrar una buena acción ante la opinión pública. Y los voluntarios reciben puntos que pueden utilizar para financiar proyectos en escuelas o asociaciones caritativas.
El reciclado de colillas no es la primera operación lanzada por TerraCycle, una empresa que desde hace diez años se especializa en el reciclado y el "transciclado" (transformación de un objeto reciclado en algo nuevo y de valor superior, según su definición) de unos sesenta desechos diferentes.
Entre estos se encuentran paquetes de jugos de fruta, botellas plásticas, bolígrafos, cápsulas de café, envoltorios de bombones y cepillos de dientes.
El éxito de la empresa ha superado las expectativas.
"Hemos recuperado muy rápido más de un millón de cigarrillos. Organizaciones formidables han garantizado la recolección. Y la industria tabacalera mostró tanto entusiasmo que lanzó el programa en Estados Unidos y España", explica.
"En los próximos cuatro meses será lanzado Francia, Alemania, Suiza, Austria, Noruega, Dinamarca, Suecia, Finlandia y quizás México", agrega este joven de 30 años nacido en Hungría y criado en Canadá.
Para fabricar un cenicero hacen falta entre 1.000 y 2.000 colillas y para una silla de plástico de jardín más de 200.000, según sus cálculos.
Los cigarrillos constituyen la principal fuente de desechos en el mundo, el 37% de todo lo que la gente tira, subraya Szaky.
Y como este joven empresario adora los desafíos, encontrar una solución para reciclarlos era uno de sus tres objetivos para 2012, junto con las gomas de mascar y los pañales usados.
"Cuando fuimos a ver a la industria tabacalera y les mostramos el plástico que hacemos a partir de sus colillas, no lo podían creer. Se comprometieron no solo a pagar el programa sino también a promoverlo", recuerda.
Para la recolección, TerraCycle se apoyó en un modelo de "brigadas" ya ensayado en 60 acciones lanzadas anteriormente, y que se llevan a cabo en 22 países por 35 millones de personas, en su mayoría mujeres y niños (que no se ocupan de las colillas).
El programa de recolección de gomas de mascar será lanzado en Brasil y el de pañales usados en Estados Unidos.
Al igual que con el tabaco, empresas vinculadas a ciertos desechos financian el reciclado: en Estados Unidos, Old Navy (indumentaria) se asoció para las chanclas y Colgate para los cepillos de dientes.
Tom Szaky, cuya empresa emplea a un centenar de personas en el mundo, espera llegar en 2013 a nuevos países de Europa Oriental y América Latina.
"Quiero arreglar todos los problemas de desechos que existen, empezando por los productos que se piensa que no pueden ser reciclados", concluye.
Trenton, EU.- Sentado en su oficina en Trenton (Nueva Jersey), Tom Szaky es un exitoso joven presidente de una empresa que ha lanzado el primer programa de reciclado de colillas de cigarrillo exportado al mundo.
Lanzado en Canadá en mayo, ampliado luego a Estados Unidos y a España, el programa de su empresa TerraCycle asegura la recolección de colillas a través de voluntarios y su transformación en plástico, utilizado luego para nuevos productos, entre ellos, ceniceros.
El principio es el mismo sea cual sea el país: los voluntarios (personas, empresas, asociaciones de defensa del medio ambiente) recogen las colillas y las envían a la sede nacional de TerraCycle, que paga incluso el costo del paquete.
Las cenizas son luego esterilizadas y disecadas, con lo cual el papel y el tabaco se mezclan, y el acetato de celulosa utilizado en el filtro -un material plástico- es fundido y reutilizado para fabricar todo tipo de nuevos productos que son comercializados.
El programa, subraya Tom Szaky, es pagado por la industria tabacalera, feliz de mostrar una buena acción ante la opinión pública. Y los voluntarios reciben puntos que pueden utilizar para financiar proyectos en escuelas o asociaciones caritativas.
El reciclado de colillas no es la primera operación lanzada por TerraCycle, una empresa que desde hace diez años se especializa en el reciclado y el "transciclado" (transformación de un objeto reciclado en algo nuevo y de valor superior, según su definición) de unos sesenta desechos diferentes.
Entre estos se encuentran paquetes de jugos de fruta, botellas plásticas, bolígrafos, cápsulas de café, envoltorios de bombones y cepillos de dientes.
El éxito de la empresa ha superado las expectativas.
"Hemos recuperado muy rápido más de un millón de cigarrillos. Organizaciones formidables han garantizado la recolección. Y la industria tabacalera mostró tanto entusiasmo que lanzó el programa en Estados Unidos y España", explica.
"En los próximos cuatro meses será lanzado en Francia, Alemania, Suiza, Austria, Noruega, Dinamarca, Suecia, Finlandia y quizás México", agrega este joven de 30 años nacido en Hungría y criado en Canadá.
Para fabricar un cenicero hacen falta entre mil y 2 mil colillas, y para una silla de plástico de jardín más de 200 mil, según sus cálculos.
Los cigarrillos constituyen la principal fuente de desechos en el mundo, el 37% de todo lo que la gente tira, subraya Szaky.
Y como este joven empresario adora los desafíos, encontrar una solución para reciclarlos era uno de sus tres objetivos para 2012, junto con las gomas de mascar y los pañales usados.
"Cuando fuimos a ver a la industria tabacalera y les mostramos el plástico que hacemos a partir de sus colillas, no lo podían creer. Se comprometieron no solo a pagar el programa sino también a promoverlo", recuerda.
Para la recolección, TerraCycle se apoyó en un modelo de "brigadas" ya ensayado en 60 acciones lanzadas anteriormente, y que se llevan a cabo en 22 países por 35 millones de personas, en su mayoría mujeres y niños (que no se ocupan de las colillas).
El programa de recolección de gomas de mascar será lanzado en Brasil y el de pañales usados en Estados Unidos.
Al igual que con el tabaco, empresas vinculadas a ciertos desechos financian el reciclado: en Estados Unidos, Old Navy (indumentaria) se asoció para las chanclas y Colgate para los cepillos de dientes.
Tom Szaky, cuya empresa emplea a un centenar de personas en el mundo, espera llegar en 2013 a nuevos países de Europa Oriental y América Latina.
"Quiero arreglar todos los problemas de desechos que existen, empezando por los productos que se piensa que no pueden ser reciclados", concluye.
Sentado en su oficina en Trenton (Nueva Jersey, este de Estados Unidos), Tom Szaky es un exitoso joven presidente de una empresa que ha lanzado el primer programa de reciclado de colillas de cigarrillo exportado al mundo.
Lanzado en Canadá en mayo, ampliado luego a Estados Unidos y a España, el programa de su empresa TerraCycle asegura la recolección de colillas a través de voluntarios y su transformación en plástico, utilizado luego para nuevos productos, entre ellos, ceniceros.
El principio es el mismo sea cual sea el país: los voluntarios (personas, empresas, asociaciones de defensa del medio ambiente) recogen las colillas y las envían a la sede nacional de TerraCycle, que paga incluso el costo del paquete.
Las cenizas son luego esterilizadas y disecadas, con lo cual el papel y el tabaco se mezclan, y el acetato de celulosa utilizado en el filtro -un material plástico- es fundido y reutilizado para fabricar todo tipo de nuevos productos que son comercializados.
El programa, subraya a la AFP Tom Szaky, es pagado por la industria tabacalera, feliz de mostrar una buena acción ante la opinión pública. Y los voluntarios reciben puntos que pueden utilizar para financiar proyectos en escuelas o asociaciones caritativas.
El reciclado de colillas no es la primera operación lanzada por TerraCycle, una empresa que desde hace diez años se especializa en el reciclado y el "transciclado" (transformación de un objeto reciclado en algo nuevo y de valor superior, según su definición) de unos sesenta desechos diferentes.
Entre estos se encuentran paquetes de jugos de fruta, botellas plásticas, bolígrafos, cápsulas de café, envoltorios de bombones y cepillos de dientes.
El éxito de la empresa ha superado las expectativas.
"Hemos recuperado muy rápido más de un millón de cigarrillos. Organizaciones formidables han garantizado la recolección. Y la industria tabacalera mostró tanto entusiasmo que lanzó el programa en Estados Unidos y España", explica.
"En los próximos cuatro meses será lanzado Francia, Alemania, Suiza, Austria, Noruega, Dinamarca, Suecia, Finlandia y quizás México", agrega este joven de 30 años nacido en Hungría y criado en Canadá.
Una grave fuente de contaminación
Para fabricar un cenicero hacen falta entre 1.000 y 2.000 colillas y para una silla de plástico de jardín más de 200.000, según sus cálculos.
Los cigarrillos constituyen la principal fuente de desechos en el mundo, el 37% de todo lo que la gente tira, subraya Szaky.
Y como este joven empresario adora los desafíos, encontrar una solución para reciclarlos era uno de sus tres objetivos para 2012, junto con las gomas de mascar y los pañales usados.
"Cuando fuimos a ver a la industria tabacalera y les mostramos el plástico que hacemos a partir de sus colillas, no lo podían creer. Se comprometieron no solo a pagar el programa sino también a promoverlo", recuerda.
Para la recolección, TerraCycle se apoyó en un modelo de "brigadas" ya ensayado en 60 acciones lanzadas anteriormente, y que se llevan a cabo en 22 países por 35 millones de personas, en su mayoría mujeres y niños (que no se ocupan de las colillas).
El programa de recolección de gomas de mascar será lanzado en Brasil y el de pañales usados en Estados Unidos.
Al igual que con el tabaco, empresas vinculadas a ciertos desechos financian el reciclado: en Estados Unidos, Old Navy (indumentaria) se asoció para las chanclas y Colgate para los cepillos de dientes.
Tom Szaky, cuya empresa emplea a un centenar de personas en el mundo, espera llegar en 2013 a nuevos países de Europa Oriental y América Latina.
"Quiero arreglar todos los problemas de desechos que existen, empezando por los productos que se piensa que no pueden ser reciclados", concluye.
leer mas: http://www.laparadadigital.com/noticias-de-chihuahua-mexico.cfm?n=16623#ixzz2IdYG7Hmb
Trenton, Nueva Jersey— Sentado en su oficina en Trenton, Tom Szaky es un exitoso joven presidente de una empresa que ha lanzado el primer programa de reciclado de colillas de cigarrillo exportado al mundo.
Lanzado en Canadá en mayo, ampliado luego a Estados Unidos y a España, el programa de su empresa TerraCycle asegura la recolección de colillas a través de voluntarios y su transformación en plástico, utilizado luego para nuevos productos, entre ellos, ceniceros.
El principio es el mismo sea cual sea el país: los voluntarios (personas, empresas, asociaciones de defensa del medio ambiente) recogen las colillas y las envían a la sede nacional de TerraCycle, que paga incluso el costo del paquete.
Las cenizas son luego esterilizadas y disecadas, con lo cual el papel y el tabaco se mezclan, y el acetato de celulosa utilizado en el filtro –un material plástico– es fundido y reutilizado para fabricar todo tipo de nuevos productos que son comercializados.
El programa, subraya Tom Szaky, es pagado por la industria tabacalera, feliz de mostrar una buena acción ante la opinión pública. Y los voluntarios reciben puntos que pueden utilizar para financiar proyectos en escuelas o asociaciones caritativas.
El reciclado de colillas no es la primera operación lanzada por TerraCycle, una empresa que desde hace diez años se especializa en el reciclado y el “transciclado” (transformación de un objeto reciclado en algo nuevo y de valor superior, según su definición) de unos sesenta desechos diferentes.
Entre estos se encuentran paquetes de jugos de fruta, botellas plásticas, bolígrafos, cápsulas de café, envoltorios de bombones y cepillos de dientes. El éxito de la empresa ha superado las expectativas.
“Hemos recuperado muy rápido más de un millón de cigarrillos. Organizaciones formidables han garantizado la recolección. Y la industria tabacalera mostró tanto entusiasmo que lanzó el programa en Estados Unidos y España”, explica.
“En los próximos cuatro meses será lanzado Francia, Alemania, Suiza, Austria, Noruega, Dinamarca, Suecia, Finlandia y quizás México”, agrega este joven de 30 años nacido en Hungría y criado en Canadá.
Una grave fuente
de contaminación
Para fabricar un cenicero hacen falta entre mil y 2 mil colillas y para una silla de plástico de jardín más de 200 mil, según sus cálculos.
Los cigarrillos constituyen la principal fuente de desechos en el mundo, el 37 por ciento de todo lo que la gente tira, subraya Szaky.
Y como este joven empresario adora los desafíos, encontrar una solución para reciclarlos era uno de sus tres objetivos para 2012, junto con las gomas de mascar y los pañales usados.
“Cuando fuimos a ver a la industria tabacalera y les mostramos el plástico que hacemos a partir de sus colillas, no lo podían creer. Se comprometieron no solo a pagar el programa sino también a promoverlo”, recuerda.
Para la recolección, TerraCycle se apoyó en un modelo de “brigadas” ya ensayado en 60 acciones lanzadas anteriormente, y que se llevan a cabo en 22 países por 35 millones de personas, en su mayoría mujeres y niños (que no se ocupan de las colillas).
El programa de recolección de gomas de mascar será lanzado en Brasil y el de pañales usados en Estados Unidos.
Al igual que con el tabaco, empresas vinculadas a ciertos desechos financian el reciclado: en Estados Unidos, Old Navy (indumentaria) se asoció para las chanclas y Colgate para los cepillos de dientes.
Tom Szaky, cuya empresa emplea a un centenar de personas en el mundo, espera llegar en 2013 a nuevos países de Europa Oriental y América Latina.
“Quiero arreglar todos los problemas de desechos que existen, empezando por los productos que se piensa que no pueden ser reciclados”, concluye.